Pobladores de La Duraznera exigen apoyos tras perderlo todo en la inundación
Habitantes de La Duraznera se manifestaron para exigir que no se vuelvan a inundar y para pedir apoyo, tras perder todos sus enseres domésticos en la tormenta del viernes pasado. A decir el Protección Civil municipal la evaluación de daños en esa colonia va al 80 por ciento.
Al menos 20 vecinos alzaron la voz, ante las pérdidas materiales que les dejó la inundación. Ahora muchos de ellos duermen en el piso porque sus colchones quedaron flotando, otros conseguir prestados aparatos electrodomésticos para continuar sus actividades cotidianas.
Nunca nos habíamos inundado. Tenemos desde 2017 para acá que nos están partiendo la madre, esto no es nuevo. De la presa no salió el agua», explicó la señora Ana Rosa Rodríguez Fernández, quien es una de las afectadas y quien también se manifestó.
Previo a la manifestación una brigada de personal del Gobierno de Tlaquepaque, acudió para continuar con la evaluación de las afectaciones. Los colonos exigieron que fueran casa por casa a verificar los daños, para poder acceder a apoyos gubernamentales, ante la situación de emergencia que viven.
Jaime Manzano, director de Protección Civil municipal indicó que ya se declaró zona de emergencia para acceder a recursos estatales y apoyar a las familias afectadas.
En la evaluación preliminar se contabilizaron 30 casas afectadas, sin embargo la cifra podría incrementarse. También explicó los motivos de la inundación.
«Es una zona que es conocida como de riesgo de inundación porque tenemos una cercanía con lo que es el arroyo de Enmedio que es una condición y la otra es que es la zona baja de la cuenca y adicionalmente a eso tenemos escurrimientos que vienen del entorno que viene de la Carretera a Chapala y Periférico, hace un poco más compleja la zona, agregado a ello hay muchas viviendas que tienen sus pisos de casa abajo de la calle»,
Muchos de los habitantes coincidieron en que el agua llegó hasta un metro de alto y que es la primera vez en que viven una situación así.
«Prácticamente perdí colchones, ropa, la licuadora, el refri. Se nos fue ropa, zapatos, trastes, si tuve varia perdida. Para mí es la primera vez que se me mete el agua, si llegaba a un tope, pero no se metía, si llegó a un exceso la lluvia del viernes. Ya no hallaba si ir por mis hijos o ir por las cosas que se estaba llevando el agua. Hasta ahorita no ha llegado nada de ayuda», comentó la señora Celia Yazmín, quien es madre de cuatro niños y vecina de la calle Biblia.
Actualmente las familias se encuentran secando sus muebles y ropa que sigue húmeda a causa de la inundación, mientras que aún se aprecian charcos y calles cubiertas de lodo.