Asesores inmobiliarios piden que dejen de subir costos de propiedades
El trabajo de un broker es buscar la mejor opción en precio para sus clientes
El reto de quienes se dedican al sector inmobiliario es lograr que se mantengan los precios accesibles a cualquier persona interesada en comprar, ya sea para invertir o como el lugar para vivir, afirmó Mario Romo Alarcón, presidente de la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI) en Jalisco.
Esto, porque tanto en renta, como en venta, los inmuebles han incrementado costos en los últimos años y aunque las tasas de interés rondan el 10% y siguen por debajo de como estaban previo al inicio de la pandemia, el costo de las propiedades sí aumentó.
“Sigue aumentando los precios de las propiedades tanto en renta y en venta, pero pues creo que también el mercado lo está aceptando y bueno aquí lo que tenemos que cuidar es que no se desfasen los precios para puro inversionista sino que también para la gente que quiera vivir ahí”.
Destacó el trabajo que hacen los brokers hipotecarios, quienes deben estar certificados, pues dicha figura existe desde hace dos décadas y es elemental en la asesoría para un trámite de crédito hipotecario.
“Fue complicado que el cliente entendiera que no le íbamos a cobrar por asesorarlo, por hacerle el trámite de su crédito y lo cual era difícil en ese entonces porque no conocían nuestro esquema. A nosotros nos pagan los bancos, entonces ese fue el reto, que la gente realmente confiara y conociera nuestro servicio que me parece que al día de hoy todavía falta mucho porque se conozca”.
Indicó que el trabajo de un broker es buscar la mejor opción en precio para sus clientes. “Lo que hacemos nosotros es buscarle siempre su mejor opción, buscarle la opción más barata de las opciones de bancos que tiene, el mejor servicio, más rapidez y de esa manera a nosotros nos pagan los bancos y nos regimos también por las políticas de los bancos, entonces que sientan toda la confianza que somos empresas pues muy formales”.
Mario Romo es además fundador de InFinance, una empresa tapatía de intermediación financiera que se conformó en 2008 en medio de la crisis inmobiliaria en Estados Unidos.
Recordó que originalmente estaban solo dos colaboradores y ahora son 180 personas en la compañía que tiene presencia en prácticamente todo el país.